La planta de fabricación de O-I en Alloa, Clackmannanshire, Escocia, es un faro de innovación y tradición en la industria vidriera. La planta también destaca por su enfoque visionario del desarrollo de la mano de obra y el compromiso con la comunidad mediante programas de aprendices y asociaciones con iniciativas educativas locales.
Con una historia que se remonta a casi 275 años, la planta de O-I Alloa es un lugar de trabajo para más de 500 personas y un museo vivo de artesanía y evolución tecnológica, que produce millones de botellas al año para whisky y otras bebidas.
James Keegans, Director de Personas y Cultura de O-I en el Reino Unido, resume el espíritu progresista de la empresa:
«En O-I, nos esforzamos continuamente por cambiar. El negocio se mueve increíblemente rápido, y necesitamos que los jóvenes formen parte de nuestra plantilla diversa para que nos apoyen en ese cambio», dijo Keegans.
Esta declaración refleja una creencia profundamente arraigada en infundir a la empresa ideas y perspectivas frescas esenciales para impulsar la innovación en una industria en rápida evolución.
Los Programas y Asociaciones de O-I son cruciales para ofrecer a los estudiantes una visión del mundo real.
El equipo de Alloa está preparando la planta para el futuro mediante programas para jóvenes profesionales, programas de aprendizaje y colaborando con las escuelas locales y las asociaciones de jóvenes trabajadores.
La planta de Alloa ofrece varios programas y asociacionesparanutrir a los jóvenes talentos. La planta lidera varios programas de aprendizaje y preparación profesional. Los programas de aprendizaje se centran en electricidad e ingeniería, con oportunidades para que los aprendices continúen su carrera profesional tras cuatro años de formación.. En los programas de preparación profesional de Alloa, visitas interactivaslas visitas escolares interactivas conducen a la contratación de aprendices, y se orienta a los estudiantes locales.
«Nosotros estamos comprometidos con nuestro programa de aprendices,acogemos y desarrollamos a cuatro aprendicescadaaño y los capacitamos durante cuatro añospara convertirse en verdaderos profesionales de su trabajo.. Después de graduarse,nosotros normalmente les ofrecemos oportunidades de carrera y formación continua para continuar desarrollando sus habilidades. Nosotros también trabajar con escuelas locales, agencias gubernamentales como DYW (Developing the Young Workforce) aquí en Escocia, pero también con programas de preparación profesional a nivel local.como por ejemplo, con empleados que asesoran a estudiantes locales.. Estas las asociaciones son una buena manera de conectar con las escuelas locales y los proveedores locales de aprendizaje para poder ofrecer oportunidades a los jóvenes». dijo Susan Lyall, jefa de operaciones en el Reino Unido.
Lyall dijo que estos programas y asociaciones son cruciales, ya que ofrecen a los estudiantes perspectivas del mundo real y vías profesionales que de otro modo no habrían considerado.
Michelle Carr, Responsable de DYW para Clackmannanshire, elogió la relación simbiótica entre la O-I y las iniciativas educativas, subrayando los beneficios de un compromiso temprano con los estudiantes.
«O-I quiere comprometerse con los jóvenes y atraerlos a una edad más temprana, donde puedan venir a O-I, echar un vistazo a sus fantásticas instalaciones e informarse de las oportunidades que tienen a su disposición», dijo Carr.
Explicó que este enfoque no sólo ayuda a desmitificar el mundo laboral para los estudiantes, sino que también alinea su aprendizaje académico con objetivos prácticos y orientados a la carrera profesional.
Un compromiso con la comunidad: Alumnos y profesores encuentran valor en elPrograma de Aprendices O-I
El impacto de los programas de divulgación y aprendizaje de O-I es tangible. Tony Martin, profesor de la Academia Alvacompartió su entusiasmo tras una reciente visita a la fábrica, diciendo: «Hoy hemos hecho una visita a la fábrica… hemos hecho algunas pruebas, y tuvimos un tour por las instalaciones, que son increibles».
Experiencias como ésta tienen un valor incalculable para estudiantes y educadores, ya que ofrecen una visión de primera mano de las entrañas de la fabricación moderna y de las innumerables funciones que la sustentan.
Aprendices como Ross McGhee, un ingeniero eléctrico de primer año que se enteró de las oportunidades de O-I a través de su escuela, Academia Alloason un testimonio del éxito del programa. El viaje de McGhee de estudiante a aprendiz subraya la importancia de las vías accesibles para acceder a los oficios cualificados y a los campos de la ingeniería, áreas en las que la experiencia práctica y la tutoría son esenciales para el dominio.
El Director de Ingeniería de Procesos de O-I, Gary Little, destacó la importancia y el valor de integrar a los jóvenes talentos en la plantilla. «Es muy importante. Somos uno de los mayores empleadores… No creo que muchos jóvenes de la escuela entiendan lo que significa ser ingeniero en este lugar, no sólo para la empresa. Es realmente importante. Es muy importante para nosotros».
James Keegans se hizo eco del sentimiento y describió a los trabajadores experimentados de O-I como mentores perfectos para la próxima generación. «En O-I contamos con una plantilla de gran talento y experiencia, por lo que podemos ofrecer un fantástico entorno de aprendizaje a los jóvenes», afirmó.
La iniciativa de O-I en Alloa es más que una estrategia de contratación; es un compromiso con la comunidad y con el futuro de la industria vidriera. Al invertir en jóvenes talentos mediante programas de aprendizaje y asociaciones educativas, O-I garantiza la continuidad de una mano de obra calificada y contribuye a la vitalidad económica y social de Clackmannanshire. Esta mezcla de tradición, innovación, compromiso local y perspectiva global convierte el trabajo de O-I en Alloa en un brillante ejemplo de cómo las empresas pueden y deben invertir en el futuro.
